*Renunció la tarde del lunes a la dirección general del Infonavit para buscar la candidatura
Jesús Revueltas
Oaxaca.- Con una sólida formación académica, una trayectoria política ganada a pulso y trabajo constante, el exdirector del Infonavit, Alejandro Murat Hinojosa, se perfila como el candidato del PRI a la gubernatura de Oaxaca en las elecciones del próximo año, con lo que el instituto político podrá recuperar un estado considerado estratégico para el desarrollo económico del país.
Murat Hinojosa renunció la tarde del lunes al Infonavit, donde dio claras muestras de su capacidad política y administrativa. Nada más y nada menos, reformó el marco legal para que los créditos del organismo de vivienda pudieran otorgarse a trabajadores para que puedan aplicarlo en tierras de propiedad social.
En los hechos esto significa llevar a la realidad de estados como Oaxaca, el derecho de todo trabajador a contar con una vivienda digna, independientemente del régimen de propiedad social de la tierra.
Eso significa que miles de trabajadores podrán tener una vivienda, no solamente en Oaxaca, sino en muchos estados del sureste del país, donde la mayoría de la tierra es de propiedad social.
Quienes han escuchado a Murat Hinojosa coinciden en la claridad de su diagnóstico de las debilidades y fortalezas del estado, y perciben una clara idea de gobierno que enfatizará el desarrollo económico y el combate a la pobreza de los oaxaqueños.
En los últimos días, previos a su renuncia la tarde del lunes 30 de noviembre, Murat Hinojosa hiló fino y se reunión con prácticamente todos los aspirantes más fuertes a la candidatura del PRI.
Apenas el domingo por la noche, el político oaxaqueño posteó en su cuenta de la red social Twitter una foto con el exdirigente empresarial, Gerardo Gutiérrez Candiani, a quien muchos pretendían ver como un candidato a gobernador externo del PRI, luego de que el tricolor abrió esa posibilidad.
Sin embargo, Gutiérrez Candiani es prácticamente un desconocido en Oaxaca, y sobre todo, está estrechamente vinculado al grupo político del exgobernador Diódoro Carrasco Altamirano, un expriista que trabaja para el PAN y las aspiraciones presidenciales del gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle. El exdirigente empresarial, es también muy cercano al gobernador saliente, Gabino Cué Monteagudo, quien seguramente muy gustoso habría dado su apoyo a Gutiérrez Candiani.
Su postulación representaría en los hechos, para el PRI, ceder una gubernatura para hacer crecer a un candidato panista que disputaría las elecciones presidenciales de 2018. Es decir, entregar la plaza sin pelearla. Nada más esquizofrénico.
Murat Hinojosa se reunió también con el senador priista Eviel Pérez Magaña, otro de los fuertes aspirantes a la candidatura, quien desafortunadamente, no se ha podido quitar la marca de quien fuera el artífice de la derrota del PRI en las elecciones en las que resultó ganador Gabino Cué.
En esa misma reunión estuvo presente el presidente municipal de Oaxaca de Juárez, Javier Villacaña Jiménez, otro de los fuertes aspirantes a la candidatura. Eviel, Villacaña y Murat, dieron muestras de interlocución política y sin duda alguna, de unidad partidista.
Con anterioridad, Murat Hinojosa se había reunido con el director de Liconsa, Héctor Pablo Ramírez, quien fue puesto en evidencia como responsable de atizar mediante la difusión de grabaciones de conversaciones, -una práctica delictiva-, una confrontación entre el exgobernador Ulises Ruiz Ortiz, para pretender dañar las aspiraciones política de Pérez Magaña y Murat Hinojosa.
Divide y vencerás, dice la máxima, la cual fue operada por el tío de HP, Alejandro Leyva, pero al quedar en evidencia, el resultado fue contraproducente.
Las fotos con Eviel, Villacaña y Gutiérrez Candiani, dan un mensaje claro: HP se queda sólo y además con la enemistad de Ruiz Ortiz. Como buen político, sin duda Héctor Pablo buscará sumarse en los próximos días a Alejandro Murat.
Una vez construida la unidad en el tricolor, el triunfo del PRI en las elecciones de gobernador del 2016 se avizora con muchas más posibilidades.
Jesús Revueltas
Oaxaca.- Con una sólida formación académica, una trayectoria política ganada a pulso y trabajo constante, el exdirector del Infonavit, Alejandro Murat Hinojosa, se perfila como el candidato del PRI a la gubernatura de Oaxaca en las elecciones del próximo año, con lo que el instituto político podrá recuperar un estado considerado estratégico para el desarrollo económico del país.
Murat Hinojosa renunció la tarde del lunes al Infonavit, donde dio claras muestras de su capacidad política y administrativa. Nada más y nada menos, reformó el marco legal para que los créditos del organismo de vivienda pudieran otorgarse a trabajadores para que puedan aplicarlo en tierras de propiedad social.
En los hechos esto significa llevar a la realidad de estados como Oaxaca, el derecho de todo trabajador a contar con una vivienda digna, independientemente del régimen de propiedad social de la tierra.
Eso significa que miles de trabajadores podrán tener una vivienda, no solamente en Oaxaca, sino en muchos estados del sureste del país, donde la mayoría de la tierra es de propiedad social.
Quienes han escuchado a Murat Hinojosa coinciden en la claridad de su diagnóstico de las debilidades y fortalezas del estado, y perciben una clara idea de gobierno que enfatizará el desarrollo económico y el combate a la pobreza de los oaxaqueños.
En los últimos días, previos a su renuncia la tarde del lunes 30 de noviembre, Murat Hinojosa hiló fino y se reunión con prácticamente todos los aspirantes más fuertes a la candidatura del PRI.
Apenas el domingo por la noche, el político oaxaqueño posteó en su cuenta de la red social Twitter una foto con el exdirigente empresarial, Gerardo Gutiérrez Candiani, a quien muchos pretendían ver como un candidato a gobernador externo del PRI, luego de que el tricolor abrió esa posibilidad.
Sin embargo, Gutiérrez Candiani es prácticamente un desconocido en Oaxaca, y sobre todo, está estrechamente vinculado al grupo político del exgobernador Diódoro Carrasco Altamirano, un expriista que trabaja para el PAN y las aspiraciones presidenciales del gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle. El exdirigente empresarial, es también muy cercano al gobernador saliente, Gabino Cué Monteagudo, quien seguramente muy gustoso habría dado su apoyo a Gutiérrez Candiani.
Su postulación representaría en los hechos, para el PRI, ceder una gubernatura para hacer crecer a un candidato panista que disputaría las elecciones presidenciales de 2018. Es decir, entregar la plaza sin pelearla. Nada más esquizofrénico.
Murat Hinojosa se reunió también con el senador priista Eviel Pérez Magaña, otro de los fuertes aspirantes a la candidatura, quien desafortunadamente, no se ha podido quitar la marca de quien fuera el artífice de la derrota del PRI en las elecciones en las que resultó ganador Gabino Cué.
En esa misma reunión estuvo presente el presidente municipal de Oaxaca de Juárez, Javier Villacaña Jiménez, otro de los fuertes aspirantes a la candidatura. Eviel, Villacaña y Murat, dieron muestras de interlocución política y sin duda alguna, de unidad partidista.
Con anterioridad, Murat Hinojosa se había reunido con el director de Liconsa, Héctor Pablo Ramírez, quien fue puesto en evidencia como responsable de atizar mediante la difusión de grabaciones de conversaciones, -una práctica delictiva-, una confrontación entre el exgobernador Ulises Ruiz Ortiz, para pretender dañar las aspiraciones política de Pérez Magaña y Murat Hinojosa.
Divide y vencerás, dice la máxima, la cual fue operada por el tío de HP, Alejandro Leyva, pero al quedar en evidencia, el resultado fue contraproducente.
Las fotos con Eviel, Villacaña y Gutiérrez Candiani, dan un mensaje claro: HP se queda sólo y además con la enemistad de Ruiz Ortiz. Como buen político, sin duda Héctor Pablo buscará sumarse en los próximos días a Alejandro Murat.
Una vez construida la unidad en el tricolor, el triunfo del PRI en las elecciones de gobernador del 2016 se avizora con muchas más posibilidades.
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